
04 Sep Alimentación en la tercera edad
La atención que se le da a la alimentación en la tercera edad suele ser escasa, pero las personas mayores, junto con los niños, mujeres embarazadas y lactantes son un grupo muy importante al que debemos ayudar a llevar una alimentación saludable y adecuada para su actividad y edad, ya que ellos por sí solos, en ocasiones y por diversos motivos, no lo consiguen.
Estos posibles déficits en la alimentación en la tercera edad, si se continúan en el tiempo, pueden llegar a favorecer que padezcan con más facilidad una enfermedad, o tener una recuperación más lenta o de peor pronóstico que una con una alimentación buena, saludable y completa.
Por eso desde Nutrición y Cocina, queremos facilitaros una serie de pautas de alimentación en la tercera edad fáciles y explicaros cómo con el paso del tiempo nuestro cuerpo sufre cambios que también afectan a la alimentación.
Efectos del envejecimiento que afectan a la alimentación en la tercera edad





Estas características hay que tenerlas en cuenta a la hora de dar recomendaciones sobre la alimentación en la tercera edad.
Necesidades nutricionales de la alimentación en la tercera edad
Menor requerimiento energético: Debido a la pérdida de masa muscular, ocasionado también por el cese de actividad física.
Mayor requerimiento proteico: Disminuye su síntesis de proteínas.
Mayor necesidad de fibra: Debido a la pérdida de movilidad del tubo digestivo.
Mayor necesidad de micronutrientes: Tienen mayor dificultad para la absorción de vitaminas y minerales. La pérdida de estrógenos a raíz de la menopausia provoca una mayor necesidad de calcio y vitamina D. Además, puede ser habitual entre las personas mayores salir poco de casa, por lo que la formación de vitamina D por acción de la radiación solar disminuye considerablemente.
Mayor necesidad de agua: Pierden progresivamente la sensación de sed, por lo que hay que estar pendientes de que se hidraten correctamente.
Menor ingesta de alimentos: Esto es provocado porque sus sentidos van disminuyendo la sensibilidad, por lo que no captan los olores y sabores correctamente. Esto causa la inapetencia por la comida. Otra causa importante son los problemas de dentición (dentadura), la disminución de la secreción de saliva o la dificultad para tragar determinadas texturas (disfagia) que pueden alterar la alimentación en la tercera edad.
RECOMENDACIONES NUTRICIONALES DIARIAS | ALIMENTOS QUE LAS CUBREN | |||
Energía: *Menos de 1600 Kcal/día podría producir carencias importantes. | ||||
Edad | Hombre | Mujer | ||
60 – 65 años | 2400 Kcal/día | 1800 Kcal/día | ||
65 – 70 años | 2200 Kcal/día | 1700 Kcal/día | ||
70 – 75 años | 2100 Kcal/día | 1650 Kcal/día | ||
75 en adelante | 1900 Kcal/día | 1600 Kcal/día * | ||
Agua | ||||
2 – 2´5 litros/día | Agua y bebidas naturales Evitar bebidas estimulantes y alcohólicas Fruta y verdura fresca | |||
Proteínas | ||||
12 – 15 % de la energía total diaria Aconsejable de alto valor biológico | Lácteos: leche, quesos y yogur Carne de ternera o de aves Pescados Huevos Legumbre (aconsejable en puré o mezclada con cereales) | |||
Lípidos | ||||
25 – 30 % de la energía total diaria Evitar el abuso de grasas de origen animal | Aceite de oliva y semillas Margarinas vegetales Tener en cuenta la grasa que también aportan el resto de alimentos como: leche, carnes, huevo… Puede ser aconsejable leche semidesnatada o desnatada | |||
Hidratos de carbono | ||||
55 – 60 % de la energía total diaria Evitar exceso de azucares y elegir preferiblemente féculas y almidones | Cereales y pan Legumbres Fruta y verdura Azúcar, miel y mermeladas en pequeñas proporciones. | |||
Sales minerales | ||||
Especial atención: Calcio, Magnesio, Hierro y Yodo. | Lácteos Carnes rojas y vísceras Pescados Frutas y verduras frescas *Consejo: utilizar sal yodada para cocinar. | |||
Vitaminas | ||||
Especial atención a todas, aunque hay que destacar la vitamina C y las liposolubles (A, D y E). | Elegir gran variedad de alimentos en la dieta diaria facilita un correcto aporte de vitaminas. Cítricos son importantes (cuidado con el pomelo que puede interaccionar con algún medicamento) | |||
Con estas recomendaciones conseguiremos que la alimentación en la tercera edad sea completa y cubra todos los requerimientos nutricionales específicos en esta etapa de la vida.
Josep de Martí
Posted at 08:46h, 28 febreroMe ha gustado mucho leer un post bien escrito sobre alimentación y personas mayores. Me permito añadir que resulta positivo detectar cuando la persona mayor empieza a sufrir dependencia. A veces, la demencia, causa de dependencia, hace que la persona no “sienta” la sed que su cuerpo sí tiene o no quiera comer nada que de verdad le resultaría saludable.. Detectar la dependencia a tiempo puede ayudar mucho y puede hacer que se reciba ayuda (aayuda a domiclio, teleasistencia, centro de día o, al final, residencia), cuando se precise. Felicidades por el post. Josep de Martí, director de Inforesidencias
Nutricion y Cocina
Posted at 10:54h, 28 febreroMuchas gracias por leernos Josep, y por el concepto que ha aportado al artículo.
En efecto, estamos totalmente de acuerdo con su visión. Detectar de forma precoz la dependencia puede permitir evitar situaciones de desnutrición de los mayores, deshidrataciones, etc.Para ello, existen multitud de herramientas que permiten su identificación temprana y que buscan, al fin y al cabo, lograr una mejora en la calidad de vida de los mayores.
Felicidades a usted por su página web, una referencia dentro del sector de las residencias geriátricas.